Con la tregua de ETA tenemos una visión fugaz de un País Vasco sin terrorismo. No está aquí todavía y quizás tengamos que ser testigos de más tragedias y sufrimiento antes de que llegue, pero llegará; la banda no tiene futuro, el buen trabajo de los últimos gobiernos, la justicia, la Guardia Civil y la madurez del pueblo vasco van a producir sus frutos.

Una de las cosas más interesantes de esta situación para  mí es que hace no mucho tiempo algunas personas con las que hablé  pensaban que el problema de ETA no tenía solución y que uno tenía que aprender a vivir con ello. Yo siempre pensé que esta  era una visión desoladora y tengo que decir que menos mal que la justicia, los gobiernos y la Guardia Civil quienes  no dejaron de trabajar para avanzar contra ETA tampoco compartía esta visión. Vivir sin esperanza es dejar que tu alma se pudra lentamente, perdiendo un trocito día tras día hasta que no queda nada.

Razones para el Pesimismo

Si pensamos en las empresas hoy en día hay muchas razones para deprimirse: EREs  que marcan una edad para la prejubilación cada vez más joven, fusiones que causan el despido de miles de trabajadores, estilos de liderazgo practicados por algunos directivos que encajarían mejor en el mundo del La Cabaña del Tío Tom que en empresas del siglo XXI que siguen tolerándolos, menos inversión en el desarrollo y la desaparición de compañías de toda la vida. Es fácil en esta situación perder la esperanza, sin embargo, es lo peor que puedes hacer ya que te arroja a un gran agujero de donde es difícil salir.

Razones por el optimismo

Quizás esta recesión era necesaria, si somos sinceros con nosotros mismos, hemos vivido una fiesta de consumo descontrolado durante cuarenta años, todos hemos participado en la fiesta y todos compartimos la responsabilidad. Pero de esta recesión quizás  salgan actitudes sobre lo que realmente necesitamos para tener una vida digna, quizás surjan empresas más alineadas y que  produzcan productos y servicios que la gente necesita en un sector en  el que seamos competitivos. Quizás muchos países  analicen seriamente lo que pueden hacer bien en un mundo globalizado y quizás los gobiernos empiecen a tomar decisiones con visión a más largo plazo.

Investigación Apreciativa

Hay un acercamiento que  nosotros utilizamos en muchos de nuestros proyectos de cambio organizacional denominado “Investigación Apreciativa” con el que, en lugar del acercamiento tradicional de resolución de problemas en el que identificas todos los problemas que tienes y trabajas en la búsqueda de soluciones, la Investigación Apreciativa se enfoca en el resultado positivo que quieres lograr y en todos los aspectos positivos, sean bienes, experiencia, habilidades o valores, que puedes utilizar en servicio de conseguir esta meta deseada. El resultado es la generación de una energía positiva en que la esperanza es palpable con lo que, en mi experiencia, se consigue avanzar más rápido y con mejor ánimo.

España tiene muchas cosas positivas que se pueden utilizar para crear un futuro mejor, es una cuestión de enfoque. ¿Cuáles son para vosotros aquellas cosas con las que se puede construir un futuro mejor?